El Registro Nacional de Equipos Móviles para la Seguridad (RENTESEG) tiene programado a partir del 22 de abril el inicio de su tercera fase que consiste en bloquear los equipos móviles que no estén debidamente registrados en su base de datos. Esta medida, que busca combatir el contrabando y la venta de celulares robados, ha generado preocupación entre los usuarios debido a la falta de una campaña informativa adecuada por parte de la entidad.
Además, esta disposición pone en tela de juicio la necesidad del requisito de homologación impuesto a las personas que compran celulares para USO PERSONAL desde el extranjero, el cual fue implementado en 2019 bajo las mismas consignas de seguridad. Si el RENTESEG utilizará el IMEI de los dispositivos, que contiene toda la información necesaria para identificarlos, la homologación resultaría redundante y solo añadiría una traba más para los consumidores.
Es importante destacar que en el Perú, una gran parte de las importaciones está relacionada con la compra de celulares, ya que los ciudadanos encuentran mejores precios al adquirirlos directamente del exterior. En un mundo globalizado, donde tiendas en línea como Amazon, eBay y AliExpress envían sus productos a todo el mundo, es normal que los peruanos busquen las mejores opciones para sus bolsillos.
Ante esta situación, es fundamental que el Estado se ajuste a los tiempos actuales y busque soluciones que no perjudiquen a los usuarios finales. En lugar de imponer cada vez más trabas y requisitos, se deben encontrar maneras de combatir el contrabando y la venta de celulares robados sin afectar a quienes adquieren sus dispositivos de forma legal.
Es hora de que el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), trabaje en encontrar un equilibrio entre la seguridad y la facilidad de acceso a la tecnología para los ciudadanos. Solo así podremos avanzar hacia un Perú más conectado y con menos barreras burocráticas.
RESOLUCIÓN DE CONSEJO DIRECTIVO N° 00294-2023-CD/OSIPTEL:
Según la información proporcionada, OSIPTEL cuenta actualmente con un registro completo de todos los códigos IMEI (International Mobile Equipment Identity) de los dispositivos móviles conectados a la red telefónica peruana. Estos códigos IMEI serán integrados automáticamente a la lista blanca, lo que significa que los celulares correspondientes podrán seguir operando con normalidad.
En cuanto a los celulares adquiridos en el extranjero, se ha establecido un procedimiento para que los usuarios puedan registrarlos y activarlos. Los propietarios de estos dispositivos deberán acudir a las empresas de telefonía móvil y presentar su equipo junto con el chip de datos y comprobante de compra correspondiente. De esta manera, podrán solicitar la activación de su celular importado y asegurar su correcto funcionamiento en la red nacional.
Esta actualización busca aclarar las dudas y preocupaciones de muchos usuarios que han adquirido sus dispositivos móviles fuera del país. Sin embargo, es importante señalar que aún quedan interrogantes sobre la efectividad y agilidad de este proceso de registro, especialmente considerando los problemas y retrasos que han plagado las etapas anteriores.
Además, persisten las críticas hacia la gestión de ADUANAS y el MTC en la implementación de esta medida. Muchos expertos y usuarios cuestionan la capacidad de estas entidades para manejar un proceso tan complejo y delicado, que involucra a millones de peruanos y tiene un impacto directo en la comunicación y el acceso a la tecnología en el país.
Es crucial que las autoridades brinden información clara, precisa y oportuna sobre cada etapa del registro de celulares, y que se tomen medidas para garantizar un proceso eficiente, transparente y sin contratiempos para los usuarios. Solo así se podrá generar confianza en la población y asegurar que esta iniciativa cumpla con su objetivo de combatir la delincuencia y el mercado ilegal de dispositivos móviles, sin perjudicar a los ciudadanos que adquieren sus equipos de manera legítima.
Seguiremos atentos a los próximos anuncios a través de sus medios oficiales y al desarrollo de esta tercera etapa, esperando que las autoridades competentes estén a la altura del desafío y respondan a las necesidades y demandas de la población peruana en materia de telecomunicaciones.